Centro Cristiano Soplo de Vida celebra su décimo aniversario, proclamando que “Algo grande viene”.
Con la casa llena y miles conectados en directo, Soplo de Vida celebró diez años de la fidelidad de Dios bajo el lema “Algo grande viene”. La cita, sustentada en Hageo 2:9 —“La gloria postrera de esta casa será mayor que la primera”—, marcó un antes y un después para esta comunidad que nació en septiembre de 2015 como una semilla de fe y hoy congrega cerca de 4.000 miembros, con extensiones en Bonao, Los Casabes y la ciudad de Nueva York.
“Esta década solo ha puesto los cimientos del gran edificio que Dios va a levantar. Esto es apenas el comienzo”, proclamó la pastora Yesenia Then durante la jornada central. Aquella palabra que un día Dios depositó en su corazón germinó contra toda estadística: de siete personas en un pequeño espacio a una casa espiritual que impacta vidas dentro y fuera de la República Dominicana.
Cinco días para honrar a Dios
Cada día ofreció una entrega especial, con el propósito de reconocer por todo lo alto la fidelidad del Señor y afirmar la esencia del ministerio: llevar salvación, restauración y vida de Dios por todos los medios posibles.
En la ministración de la palabra estuvieron, además de la pastora Then, los evangelistas Starlin Marte, Erick de la Rosa y Patricio Jiménez, y los pastores Robert Toribio y Melvin Susana.
En la adoración: la salmista Rosa Karina, Ministerio Cita con el Padre, Jordán Mateo, Elizabeth Soler y World Worship.
De dónde venimos y hacia dónde vamos
Soplo de Vida no es solo un lugar; es una familia de fe que forma discípulos, levanta líderes y extiende las manos a su entorno. Estos diez años confirman el respaldo y sustento celestial que nos ha permitido ser respuesta de Dios para este tiempo y proyectar la visión a las naciones.
Con el corazón en Hageo 2:9, la casa se alinea con una nueva etapa de expansión: consolidación de sedes, fortalecimiento de procesos formativos y una agenda de impacto espiritual y social que seguirá soplando vida donde más se necesita.
Diez años celebran lo que Dios ya hizo; “Algo grande viene” anuncia lo que Él hará. Y en esta promesa caminamos: la gloria postrera de esta casa será mayor que la primera. ¡A Él sea toda la gloria!
